viernes, marzo 13, 2009

Blog amigable!


Instrucciones

1.- Imagen del premio. Me lo dio Brian (futuro escritor de éxito). Gracias, puesto que también es mi primer premio.

2.-Contar 3 cosas que nunca hayas hecho pero que te gustaría hacer:

- Irme a vivir una temporada (laaarga), a trabajar, o a lo que sea a Alemania, Grecia (Rodas) o Egipto (El Cairo). Preferiblemente esta última. Dubrovnik también se acepta ;)
- Recuperar mi arte... ("La pintora" by mi abuela.)
- Ser Traveller de Lonely Planet (Globe Trekker).

3.-Contar tres cosas que nunca hayas hecho y que jamás harías:

- Darle la razón a mi tía con el rollo ese de que por una respuesta a pregunta soy psicópata. (No os asusteis, no soy Dexter, respeto la vida humana)
- Empuñar una pistola, herir a alguien.
- Cocinar lasaña o canelones. :S (Me ha costado encontrar ésta última!)

4.- Entregar el premio a 6 blogs y avisarles en su página:

Aiii eso lo tengo más chungo...

Atikesia... a su futuro blog, ya que me empeñaré en que abra otro.
Y los otros cinco... quienes gusten!

lunes, marzo 09, 2009

Que bien me cae este hombre


...¡aunque se le vaya la pinza demasiado a menudo!

El gato

Carmen abrió los ojos. Estaba tumbada de lado en su cama. Mirando hacia el armario. Y una pesadilla le había hecho despertar de golpe, de tanto terror que sentía. Se destapó y se incorporó. Posó los pies desnudos en el helado suelo de su dormitorio y se ciñó la bata que la esperaba sobre el galán. Fue al baño, se duchó y vistió. Abrió la puerta del piso y se encontró con aquel gato.
-¡Fúuu! ¡Y no vuelvas! –medio gritó asustando al bicho.
Bajó por las escaleras, cerró la ventana de la entreplanta, que alguien del edificio siempre abría por la noche, hiciera frío o calor, y ella cerraba por el día. Y siguió bajando hasta el portal. Salió a la calle. Otra vez aquel cielo abovedado y triste. Se acercó al quiosco, que estaba en los locales de su mismo bloque.
-Buenos días Paco, -dijo cogiendo el periódico autóctono de la ciudad- ¿y la Úrsula?
-Con la gripe, y me he tenido que bajar yo sólo a abrir. –Dijo el quiosquero con voz apagada.
-¡Con lo mayor que está usted! Bueno, dígale de parte mía que se mejore. –Se hurgó en los bolsillos y contó un euro sesenta entre monedas de cobre y doradas. –Deme usted lo que sobre en regaliz rojo.-
-Ale, regaliz rojo, del que os gusta a tu padre y a ti.
-Que como niños somos. –Le respondió Alfredo achuchándola – ¿Has visto la portada?
-Pues no. –Se sacó el periódico de debajo del brazo y lo desdobló- Dios mío, ¡pero cómo es posible!
-¿Que ha pasado mamá?- le preguntó su hijo Guille parando de comerse los cereales.
-Que hay demasiados locos sueltos. Venga, termínate eso ya.