martes, noviembre 17, 2009

El imaginario del doctor Parnassus





Un derroche visual.

En medio de espectáculos circenses confusos y desafortunados, de un Londres espléndido, de una sociedad inglesa no tan brillante, surge un personaje, Tony. Un único personaje, interpretado por casi cuatro miméticos actores, que nos hace descubrir cómo se dividió el rodaje. Un personaje de múltiples caras (interpretativa y literalmente), embaucador, tramposo, encantador, amnésico. Quizás hasta algo Joker...
Una historia encantadora con una damisela encantadora, hipnotizante; un sabio enano, un viejo que ama los juegos (¿verdad que le aportan algo a la vida?), y un fiel y joven miembro del circo que recogieron de la calle.

Terry Gilliam nos abre la impresionante imaginación del doctor Parnassus, y la de todo el que se atreve a pasar, engañado o a voluntad, a través del espejo.

Un mundo lleno de color, en el que si te atreves a entrar, sin duda, echarás de menos.